El soborno puede ser abordado de entrada o de salida. Para cada caso no todas las medidas antisoborno son igualmente efectivas.

Soborno saliente

La norma ISO 37001:2016 en su anexo propone la distinción de “soborno saliente”, que se refiere al realizado por personal de la organización a personas que no pertenecen a la organización.

Ya que el soborno saliente es realizado por personal de la organización, es posible implementar medidas y controles con mayor efectividad que para el soborno entrante.

Es recomendable implementar medidas para mitigar controles actuales débiles tales como la revisión de archivos de nómina, de registros de gastos del personal y comparación entre ellos para identificar posibles conflicto de intereses. 

Soborno entrante

Se entiende por “soborno entrante” al que es realizado al personal de la organización, por personas que no pertenecen a la organización,

Ya que el soborno entrante es realizado por personas no pertenecientes a la organización, generalmente no se cuenta con la suficiente información ni la autoridad necesaria para que las medidas de control antisoborno puedan ser implantadas eficazmente.

En el soborno entrante generalmente el soborno es propuesto y realizado a personal de la organización que tiene autoridad, de manera que pueda tomar decisiones o influir en ellas pasando por alto los criterios y normas establecidas para asegurar decisiones justas.

Algunas disposiciones de ISO 37001:2016 contribuyen notablemente en la mitigación del riesgo de soborno entrante, tales como: 

• La prohibición expresa del soborno en la política antisoborno (5.2); 
• La formación y concienciación ante el soborno que se debe proveer al personal (7.3)
• El apoyo que se debe dar a las personas para que informen sobre inquietudes sobre sobornos sin represalias (8.9); 
• La limitación sobre la hospitalidad y los regalos que el personal pueda aceptar (8.7); 
• Los controles financieros y no financieros que deben ser implantados en la organización (8.3 y 8.4).